CirugíaUn tipo de 47 años muy preocupado por parecer joven; el día de su cumpleaños, decide hacerse un estiramiento de cara. Hecha la cirugía, el tipo sale muy contento de la clínica con su cara nueva. Se detiene en un puesto de diarios, compra uno y le pregunta al vendedor:
- Óigame amigo, no lo tome a mal pero tengo una curiosidad, quisiera que me conteste una pregunta: ¿cuantos años cree que tengo?
El diariero le dice:
- Y, no sé.... unos 32.
Contento de la vida, el tipo le dice:
- En realidad tengo 47 años.
Luego este buen señor entra a un Mc Donalds, pide una hamburguesa y le pregunta lo mismo al cajero. El cajero le dice:
- Y, yo le calculo unos 29 años.
El hombre, cada vez mas agrandado, le dice:
- No, tengo 47.
Luego toma el ómnibus para volver a su casa, y se sienta al lado de una anciana. Una vez más, el tipo hace la pregunta:
- Discúlpeme, señora, ¿cuantos años piensa usted que tengo?
La viejita lo mira pensativa con su cara llena de arrugas, y le contesta:
- Mire, hijito, yo ya tengo 85 años y no veo bien. Sin embargo, cuando era joven yo tenía un método para adivinar la edad de los hombres. Les metía la mano en el calzoncillo y les decía la edad correcta.
El hombre dudó un poco, pero viendo que no había nadie en el ómnibus pensó: "bueno, probemos, total...", y acto seguido le dice a la viejita que comience con su tarea. La viejita le mete la mano en el bulto, y le franelea los huevos al tipo. Al cabo de exactos diez minutos, la señora dice:
- Usted tiene 47 años.
El tipo, asombradísimo exclama:
- Pero, que increíble! Dígame, ¿como lo hace?
Y la anciana le contesta:
- Fácil. Es que yo estaba detrás suyo en la cola del Mc Donalds.
Un camionero. De Coca Cola va por la ruta, una chica espectacular le hecha
dedo, el camionero la recoge y cuando estaban llegando, la chica recaliente, le
agradece eternamente y le ofrece su cuerpo como pago por el favor de llevarla.
Raudo y velozmente el camionero frena y se le tira encima... pero ella amaba la
naturaleza y queria hacerlo a pleno sol. Nuevamente y a toda velocidad el tipo
saca la lona de Coca Cola del camion, agarra 4 cajones con botellas, pone uno en
cada punta de la lona para que no se la lleve el viento, la chica se quita la poca
ropa que llevaba, se echa en medio de la lona y el camionero se pone a darle. Tan
mala suerte tuvo el tipo, que en medio del asunto, la chica se desmaya y el
camionero huye despavorido temiendo que lo acusen de asesinato, dejando a la
chica botada al rayo del sol. A los cinco minutos frena un carro con 4 tipos y al ver
la situacion se fornican repetidamente a la chica desmayada. Mientras se tomaban
una Coca Cola del cajon, uno le dice al resto: - Estas SI son promociones, no
como la mierda de Pepsi con las tapitas...
PrevenciónAprovechando la ausencia de su esposa e hijos que pasan un fin de semana en la playa, Don Luis, se encuentra insistiéndole a la nueva y muy bonita sirvienta, aunque un poco bruta, que le abra la puerta de su dormitorio.
- Vamos, María, abrí la puerta que no te va a pasar nada malo. ¡Sólo vamos a pasar un lindo rato juntitos!
- No, siñor, ¡tese quieto y no moleste!
- Mirá, María, si abrís te aumento el sueldo...
- ¿Y, depué quí li dicimo a la patrona?
- Nada, che, ella no tiene porque enterarse de nada.
- Ta bueno, patrón, pero pase por dibajo di la puerta el cirtificado de lo análisi para saber que usted no tiene SIDA.
Don Luis recuerda el chequeo médico que se acaba de practicar y le pasa hasta su acta de nacimiento, ante lo cual la sirvienta por fin cede y Don Luis se da el gustazo.
Al rato ya calmado y disfrutando de un cigarrillo, le dice a María:
- ¡Caramba, María, no sabés leer ni escribir, pero, que bien estás enterada de las cuestiones de salud!
- Sí, pachoncito, yo seré inorante, muy inorante, réquete inorante, ¡pero esto del SIDA no me lo pegan dos veces!
En el cieloTres mujeres mueren juntas en un accidente y van al cielo...
Al verlas llegar, sale San Pedro y les dice:
–Bienvenidas al cielo, aquí solo hay una regla: no pisar nunca un pato.
Las tres mujeres traspasan las puertas del cielo y, obviamente, todo está lleno de patos por todas partes. Tan lleno que es casi imposible no pisar un pato...
Aunque las tres mujeres ponen todo el cuidado posible, una de ellas, sin querer, pisa un pato.
En eso viene San Pedro como una furia acompañado de un hombre increíblemente feo y le dice a la mujer:
–Te lo advertí, no pisar patos es la única regla del cielo. Como castigo por no cumplir esa regla te encadeno a este hombre tan feo para toooooooda la eternidad.
Y ahí que los deja San Pedro...
Al día siguiente otra de las tres mujeres, también accidentalmente, pisa otro pato.
Así que, de nuevo, viene San Pedro veloz con otro hombre increíblemente feo y suelta de nuevo la cantinela:
–No pisar patos es la única regla del cielo, así que, por desobedecer, quedas encadenada toda la eternidad a este hombre tan feo.
La tercera, viendo lo que ha pasado a sus dos amigas, camina por el cielo con todo el cuidado y consigue no pisar ningún pato...
En eso que un día llega San Pedro junto con el hombre más hermoso que la mujer había visto en su vida y, sin decir palabra, los encadena juntos y se va...
La mujer, asombrada, se pregunta en voz alta:
–Que habré hecho yo para merecer la suerte de estar encadenada a este hombre tan increíblemente hermoso...?
El hombre, que la oye, le contesta:
–Tú no sé, pero yo he pisado un jodido pato...
